Como detener mi consumo, al menos reducirlo

Antes que nada, una disculpa por haber tardado tanto en escribir, aún no les quiero decir por qué tardé tanto, pero ya que termine este proceso les contaré más, realmente no es algo malo o algo así, pero es algo que quiero acabar antes de hablarlo en algún lugar público.

Bueno, y ahora a los que venimos, a divagar con alguna idea nueva. Esta semana compré unos cuantos productos en amazon, realmente nada importante y pero en definitiva innecesarios, y me di cuenta que he estado gastando mucho y que tengo una mala relación con el consumo. No crean que soy un adicto a comprar cosas o algo así, creo que soy una persona con hábitos de consumo bastantes comunes, pero con esto no quiero decir que sean buenos, al contrario lo que quiero decir es que muchos de nosotros tenemos esta mala relación de consumo.

Así que he decidido hacer algo al respecto y como siempre, tengo un plan.

El plan

Como que todo hoy en día está pensado en ser desechado y no me refiero a la famosa obsolescencia programada, creo que ese es un tema distinto, me refiero a que las cosas están pensadas para que en algún momento sean lentas, obsoletas, dejen de servir o simplemente se vuelvan un pisapapeles y me niego a eso… Lo más que puedo.

Me quiero explicar, cuando compras un teléfono, ¿cuál es tu expectativa de años que durará? Quizá piensas en “2 años”, “5 años” o quizá hasta “10 años”, ahora piensa en esto, imagina que te vas a comprar un reloj, no uno inteligente, uno normal, digital o análogo, ¿cuál es la expectativa de vida que tienes de ese reloj? quizá pensaste, “5 años”, “10 años” pero quizá pensaste “50 años” o incluso “para siempre”. ¿Por qué pensamos así de los relojes pero no de los teléfonos? Muy simple, en un teléfono hay una cosa que los hace morir tarde o temprano y no es el marketing, no es la batería, ni nada de eso. Es el software.

Un teléfono tarde o temprano se dejará de actualizar y ese no es el problema, el problema es que el teléfono lo usamos para hacer cosas como mandar mensajes, y por ejemplo, Whatsapp seguirá sirviendo después de que tú teléfono se deje de actualizar, pero no toda la vida, un día dejará de funcionar y en ese momento ¿vale la pena seguirlo usando?

Creo que hemos descompuesto como funciona la tecnología, pero aún podemos arreglarla o al menos intentarlo.

Paso 1: Encuentra todas las cosas que sean inteligentes.

Busca en tu casa cosas que dependen de que su sistema esté conectado a internet, ¿un teléfono? sí, ¿una televisión inteligente? No necesariamente, por que la TV funcionará hasta cuándo ya no se actualice, quizá tu computadora, quizá tu tablet o tu Alexa.

Paso 2: Encuentra qué actividades hacen esas cosas y cómo reemplazarlas.

Por ejemplo, no existe una manera de reemplazar Whatsapp, pero sí Spotify, puede ser con un iPod viejo, puede ser un simple reproductor mp3 o si te pones más aventurero, hasta con un radio viejo.

¿Quieres reemplazar tu reloj inteligente? Compra un reloj, un BUEN RELOJ, no compres la versión más barata, compra uno que te dure unos muy buenos años, uno que le quieras regalar a tus nietos, no tiene que ser un Rolex, tan solo compra un buen Casio y sí, si tienes el dinero para comprar un teléfono o computadora dónde leer esto en definitiva puedes comprar un buen Casio.

¿Quieres comprar una lavadora o un refrigerador con pantalla para ver YouTube? Un día esa lavadora se dejará de actualizar y su mayor punto de venta dejará de funcionar, mejor compra un buen centro de lavado, sin Inteligencia Artificial pero que lava bien, que cualquier mecánico puede arreglar por menos de $10 dolares y que quizá le heredes a tus hijos.

Y lo más importante para mí. DEJA DE COMPRAR ROPA DE MODA, el fast fashion es de las peores cosas que el ser humano ha creado, a un lado de las redes sociales y la Coca-Cola. Ve y compra buena ropa, poca ropa pero buena ropa, compra una buena playera 100% hecha de algodón, que se sienta de buena calidad, aléjate de los estampados y ve poco a poco, entiendo que cambiar el closet es caro y complicado, ve poco a poco, ve probando marcas, tallas y encuentra lo que te guste para cada temporada del año.

Paso 3: Comprométete

Ok, poco a poco has ido haciendo de un sistema contra la obsolescencia, ahora comprométete. Quiero recordarte algo: ¿recuerdas ese sentimiento de felicidad que te da el comprar una cosa cara? Ese sentimiento se desvanece rápido, se llama adrenalina, obtén eso saliendo a hacer ejercicio, juega un videojuego, ve una película de terror o súbete a una montaña rusa, no dejes que las empresas te hagan depender de ellas para sentir.

Ok… Perdón.

A ver, entiendo que no todo es reemplazable, toda la vida tendremos que comprar nuevas computadoras, toda la vida tendremos que comprar nuevos teléfonos, pero es importante hacerlo consciente, no comprar cosas por que “sean viejas”, hay que explotarlas hasta que genuinamente ya no puedan ser usadas y tampoco se trata de acumular, si algo deja de funcionar y ya no tiene arreglo, suéltalo, tíralo, vendelo, regálalo y ve por uno nuevo, pero no dejes que el lanzamiento de una nueva versión te haga comprarlo. Admira lo que compraste, hubo humanos trabajando en eso para que tu lo tuvieras y trata de usar las cosas lo más desconectadas posibles, haz que no dependan de que una empresa siga actualizando sus productos.

Quiero trabajar en esto. Regresaré a escribir más constantemente estos días, pero en algunos posts en el futuro les contaré qué me ha estado deteniendo de poder escribir tan seguido como quisiera.